Muchos le señalarían. Tantos otros se burlarían e incluso los menos humanos intentarían una y otra vez pisotear sus sueños. Pero el polaco Tadeus Baranowski no cesó en su sueño de llevar sus novelas gráficas sobre una cría de dinosaurio a todos los rincones del mundo. Diplodocus no es sólo una historia animada de aventuras con personajes carismáticos, tiernos y llenos de humor, es también un mensaje sobre la importancia de perseguir tus sueños y no los del resto. Traigan o no fama o reconocimiento, conllevan igualmente victoria porque has satisfecho el capricho de tu alma. Por eso es tan importante ir al cine a ver en familia la última película distribuida por Vértigo. Diplodocus es un niño como cualquier otro. Envida a sus padres constantemente a viajar más allá de la ciénaga, la zona de confort en la que todos nos sentimos tan seguros como aburridos. Primer paralelismo con la vida banal y adulta. Pero a veces, una circunstancia inesperada nos obliga a abandonar esa zona, y sólo los q...