Ni magia, ni ilusionismo, ni tan siquiera un sencillo juego de cartas. El mentalismo que propone Fito Crawford en "La Escalera de Jacob" responde, simplemente, a la interpretación del espectador. En palabras del artista, al "espacio que queda entre lo que yo hago y cómo lo perciben ustedes, y que es completado por su mente". Algunos dirán de él que es curioso, nosotros que es excepcional pero todos coincidiréis en que es "Straño".
Sobre el recinto poco más que añadir; refrescos y copas de vino más que económicos para amenizar la espera para el espectáculo contratado y, cuando por fin llega, desciendes hasta las cavernas del local de Lavapiés. Allí bastan un puñado de butacas y un discreto escenario para satisfacer las necesidades lúdicas de los centenares de personas que cada día allí se congregan.
Esta vez un servidor acudía más escéptico que expectante, por la incredulidad que siempre me ha suscitado el "1,2,3... ¡duerme!" o el "cuando despiertes serás una gallina". Afortunadamente, Fito huye de tópicos con la fórmula más típica: el entretenimiento. No es magia de cerca, ni de lejos...quizá ni siquiera sea magia. Pero si encontráis el truco, decídmelo. Porque a lo que nosotros asistimos fue a una sucesión de números y situaciones en los que era difícil no quedar pasmado o boquiabierto y, lo peor, es que el artista apenas empleaba más recursos que su excelente oratoria, su atractiva puesta en escena y un humor sano que escasea últimamente allá donde uno va.
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| El entorno ayuda a la atmósfera mágica y mística del espectáculo. |
Olvídate de paranoicas conspiraciones y de buscar compinches: Crawford utiliza como hilo argumental de la hora que dura el espectáculo a una docena de los presentes, asegurándose de que todos salgamos -yo lo hice- o bien alguien con quien vayamos salga a uno de los números para dar fe de su autenticidad. Y, lo más importante, mirando constantemente por hacer sentir cómodo a los voluntarios u obligados.
Deja a un lado también tus dotes detectivescas y tu rebuscado sentido de la observación: insisto, cuando algo es tan "Straño", de nada sirve buscarle explicación...simplemente, como dice el artista, es una invitación mental a dejarse llevar y, al menos durante 60 minutos, comprobar que, como en tantas otras ocasiones de la vida, lo raro e inexplicable es bello y seductor.
otiuMMaximus
- El sentido del humor y la grandeza del maestro de ceremonias.
- Una interrogación siempre esconde una respuesta.
- Préstate voluntario para algún número. No te arrepentirás.
otiuMMenester
-¿Dónde? Calle de Lavapiés, 9. 28012 Madrid. 695 263 509. www.laescaleradejacob.es (consulta también el resto de la cartelera, pues en agosto siguen con una completa programación).
-¿Cuándo? Todos los viernes de agosto a las 21:15 horas.
-¿Cómo? Aunque tienes un paseo, puedes aparcar desde la zona de La Latina hasta llegar a la misma calle Lavapiés. En metro, L3 (Lavapiés)
-¿Cuánto? 8 euros.
Jesús Clemente Rubio