Partidazo del polivalente defensa merengue que sigue reclamando lo que Gareth Bale, de manera casi forzosa por la salida de Cristiano Ronaldo, consagró con varias ocasiones y un gol: la titularidad. Un Madrid que sigue buscando su nueva identidad se impone en el primer partido y derbi madrileño de la temporada a un Getafe que fue de más a menos.Era una noche -bien entrada, además- en las que tocaba olvidar y ahogar las penas de la Supercopa de Europa y el adiós de CR7 de la mejor manera posible. Pese a la victoria, no fue así, pues el Madrid dejó dudas sobre la continuidad de balón, el aprovechamiento de espacios y el control del partido, pero sí apuntó maneras en esos tres campos gracias a la apuesta de Lopetegui por la "casa", la juventud, la velocidad y el dinamismo.
Fruto de tal apuesta fueron de hecho los dos goles; mientras que en el primero Bale templó el balón al área y, tras el despeje, Carvajal estrenó la cuenta anotadora del Madrid en esta Liga, en el segundo la astucia y rapidez de Asensio robaron cartera y esférico a Djené y, tras driblarle, el centro fue rematado esta vez por quien asistiese en el primer gol: el galés. Antes, varios destellos aunque nunca seguidos de Marcelo, cuyas cabalgadas finalizaban casi siempre en pase al área con remate a la cruceta incluido, de nuevo, de Bale. También Asensio, quizá aprovechando el desvanecimiento de Isco, fue protagonista irregular de un partido en el que sólo un jugador blanco justificó su titularidad que, ironías de la vida, siempre estará discutida: Nacho se marcó un memorable partido de esos que si lo completa un jugador del equipo visitante, el próximo año es fichado por Florentino Pérez.
Soberbio en las ayudas, las recuperaciones, las aperturas de juego, colocación, seguridad, medición de tiempos y entradas... Nacho es la clásica solución que uno siempre tuvo en casa, delante de sus narices, y se empeñó en mirar a otro lado.
Sobre el Getafe, salvo cierta garra inicial, decir que fue entregando el partido o bien asistiendo como espectador a que se lo arrebatase el Madrid si bien pudo poner en un aprieto al conjunto blanco de transformar alguna de las primeras y únicas llegadas. Con todo, el Madrid inyecta sedante a la afición con la primera victoria liguera, pero este año hará falta más, mucho más que victorias y los 3 puntos para hacer olvidar un final y principio de temporada con no muy buenas noticias.
Jesús Clemente Rubio