Necesitamos regresos, retornos, buenas noticias, resurgimientos. Porque estamos siendo duramente golpeados desde múltiples ámbitos. Pero también son muchas las materias en las que nos podemos escudar y apoyar para tomar un nuevo impulso que nos lleve aún más lejos de lo que lo hicimos antes de la pandemia. Con esa premisa llega la gira "Fénix" de la Film Symphony Orchestra que, partiendo de la resurrección de la mitológica ave, nos invita a encarar de nuevo la vida con optimismo e ilusión y, aprovechando el mensaje, también trae a nuestros agraciados oídos piezas relacionadas con películas que vuelven este 2022 o acaban de hacerlo, como Matrix Resurrections o West Side Story. No te preocupes si a corto plazo no hay cita madrileña en su gira, volverán y, como decimos, lo harán con fuerza
Porque no entienden otra manera de pisar escenario y ejecutar cada pieza. Ya lo comprobamos en Hollylove, el último show de la FSO al que asistimos y del que te hablamos aquí. Todos los miembros con Constantino Martínez-Orts a la batuta parecen abrirse de par en par y ofrecernos el máximo de sus emociones en cada ejecución con prólogo del propio Constantino e inevitable recuerdo de las imágenes que acompañan a las melodías que estás escuchando.
Una ejecución magistral, un escenario a la altura como es la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional de Música y un dinamismo del espectáculo posible gracias a cuidadas elecciones e interpretaciones. Como tenéis el programa de mano listo para descargar en la web no es destirpar si os hablamos del repertorio, así que os diremos que con el eterno apego a bandas sonoras como la de Los Intocables o El Código Da Vinci nuestras favoritas, y creemos que las del resto de los asistentes, fueron aquellas piezas que contaron con interpretación vocal. Soberbia como cada uno de los instrumentos que suenan, Gladiator y El Señor de los Anillos se llevaron la palma por tamaña, semejante y enorme presencia que llenó todo el pabellón.
FSO, oda a la cultura musical
Martínez-Orts y su orquesta siguen en forma, él nos encanta por los prólogos a toda velocidad y repletos de curiosos detalles que contextualizan la cinematográfica música. Además de por ser el paradigma de trabajador que logra combinar sus dos pasiones como forma de vida y trasladar toda esa emoción al espectador. Todo ello rematado por un final ya marca de la casa que es imposible completar sin salir con una sonrisa y colmado de esperanza e ilusión por lo que está por venir. Gracias Film Symphony Orchestra por expandir la cultura musical más clásica y pura entre los españoles e invitarnos a volver siguiendo la estela de todo un ejemplo de caer y levantarse una y otra vez: el ave Fénix.
Más información en https://filmsymphony.es/
Jesús Clemente Rubio