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La Historia Interminable, el Musical: Con permiso de Broadway



 Se levanta el telón. Y aparecen uno, cinco, doce artistas sobre el escenario rodeados de hiperbolescos elementos decorativos, detalladas piezas de vestuario y suficiente atrezzo y ornamentación como para hacernos creer que hemos viajado a Fantasía a lomos de Fújur con tan sólo ocupar nuestra butaca. Añadid a ese momento una calidad interpretativa y vocal, en general, sublimes, cuya carta de presentación es la potente voz de Josean Moreno, quien ya nos deleitó en El Médico y que se echa la apertura a los hombros haciendo que el auditorio se relama con lo que está a punto de ver. Dicen que el amor comienza en los primeros compases de ver a la persona de la que te enamoras... bastaron esos primeros segundos de musical para saber que estamos ante una de las joyas de la corona de la cartelera madrileña. Sin nada que envidiar al distrito teatral más importante del mundo. Damas y caballeros, con permiso de -y con cabida en- Broadway... La Historia Interminable, el Musical.

Aquel día en el Teatro Imperial de Broadway, con Los Miserables de Víctor Hugo en cartel, nos enamoramos del teatro. La puesta en escena, la perfección vocal, las dotes interpretativas, el excelente casting... inmejorable. Y se convirtió en nuestro punto de referencia para juzgar todo lo que hemos visto desde entonces... echando en falta, aquí en España, siempre lo mismo: la ambición, el pensar a lo grande, el convertir el escenario en el mundo representado a golpe de cantidad y calidad de artistas así como ornamentación, música, iluminación e incluso efectos conformando un exquisito polvorín. 

Claro que también necesitamos un libreto a la altura de todo lo anterior. Y La Historia Interminable, el Musical, que sigue el libro más allá de la película y no se detiene en los deseos de Bastian para Fantasía, cumple con creces esas exigencias dejando en manos de producción, dirección y elenco el resultado final. Y qué resultado. Mencionables son todos por coreografías, voces y puesta en escena, pero además de Josean Moreno merecen ser destacados nuestro(a) Bastian, Noelia Rincón, que se atreve con toda la escala musical en sus números y llena el escenario con ejecución sobresaliente de personaje tan icónico. Al igual que la Emperatriz Infantil y Xayide, las dos Teresas, Abarca y Ferrer respectivamente. Un desarrollo dinámico y que hace pensar a los que crecimos con la película que los "recortes" o "resúmenes" de alguna de las puertas, por ejemplo, habría dejado un producto cinematográfico impecable. 

Pero tenemos que volver sobre nuestros pasos y referirnos a la ambientación y los elementos decorativos. ¿Sabéis cuando, una vez terminada la función, los actores elevan los brazos para dirigir los aplausos a técnicos varios? Aquí son más merecidos que nunca porque las luces, música y efectos, todo baila en armonía y acompañado del espectacular despliegue de los Morla, a Fújur, Comerrocas y demás fauna de Fantasía. Un despliegue de gigantesca inversión que termina por sumergirte en aquel mundo y redondear el mensaje que marcó generaciones: Fantasía siempre necesitó del mundo real... igual que el mundo real siempre necesita de algo de Fantasía. Ponla en tu vida con el musical de moda. La Historia Interminable.

Más información en https://www.lahistoriainterminablemusical.com/


Jesús Clemente Rubio