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Guía Orlando II, 2 días sin parques en la ciudad más divertida del mundo

 Cuatro parques temáticos de Disney, dos de Universal, acuáticos aparte. Gatorland, Legoland, el parque de Peppa Pig... Orlando es el parque de atracciones del mundo. Pero también una ciudad que merece ser descubierta en su centro histórico y disfrutada en uno de sus epicentros y arterias del entretenimiento como es la International Drive. Tranquilos, ya nos cansamos por vosotros para traeros otros planes en Orlando más allá de parques y atracciones. Dos días sin ellos en Orlando, dos días siendo un "Otowner".


Guía Orlando Día 1: Hormigón, rascacielos y jardines

Conviene comenzar en el mismo centro del Downtown ubicado en la Wall Street Plaza que, si bien es allí donde confluye todo, se convierte por las noches en el centro neurálgico que está llamado a ser por ubicación y amplitud. Multitud de bares rodean una zona de gran ambiente que encuentra el cenit en las noches de viernes y sábado con música de DJ en directo y la algarabía de las llamadas "Block Parties". Ni que decir tiene que aquí se congregan los locales para celebrar fechas señaladas y grandes festivales.




Modernidad e historia en Orlando.


A pocos metros caminando llegamos al centro "no oficial" de la ciudad, Church Street, perfecto resumen de los contrastes de Orlando con edificios históricos como Rogers Building, primero de la ciudad y que data de 1886 (obra del inglés Gordon Rogers) pero también con los últimos locales nocturnos y restaurantes. De la antigüedad e historia del icónico depósito ferroviario Railroad Depot hasta el gigantesco, recorriéndola casi hasta la autopista, Kia Center donde los Orlando Magic, entre otros equipos municipales, disputan los partidos de la NBA.




Lake Eola Park, un parque para todos los perfiles visitantes.


Calor y humedad aparte, la Otown (así llaman los locales a Orlando) es una ciudad simpática para el viandante, cuadriculada y de sencilla exploración y con rincones variopintos. Por ejemplo la urbe con musculatura de hormigón y cristal que acabamos de repasar, salpicada de toques clásicos como el Rogers Building o la iglesia cercana que hay, deja paso a un puñado de metros a un enorme descanso a la vista de 23 acres. El parque del Lago Eola se extiende a lo largo de East Washington Street con numerosos rincones para el descanso, sombras suficientes para combatir el calor y alternando fuentes y vegetación con otras zonas de creación humana como un parque infantil con columpios. Un anfiteatro, su famosa fuente e incluso una pagoda china completan un patio de recreo natural para los niños que desafía los mastodónticos Disney y Universal.



Thornton Park enamora desde el primer vistazo.


Si continuamos al este en el mapa, hablando de contrastes, llegamos al barrio más 'cool' de Orlando. Una suerte de vecindario clásico de costa californiana, con casas bajas y amaderadas, cafeterías hipster, galerías de arte y bistros que, de cuando en cuando, sorprenden con algún mural en sus paredes. Una antesala de lo que encontramos, desde aquí y hacia el norte, en 50 Mills: una barriada en la que mejor desplazarse en coche con aire acondicionado del que sólo apearse apenas veamos uno de los numerosos murales que decoran paredes de comercios de todo tipo.


En 50 Mills hay murales para todos los gustos. ¿Cuál estu favorito?

Con la mañana más que aprovechada en los rincones citados, resta reponer energías para después dirigirse al jardín botánico Harry P Leu Gardens, alejado del centro y que exige alquilar vehículo. En realidad, es el medio de transporte que recomendamos, salvo si tu viaje se centra única y exclusivamente en los parques y partirás hacia ellos desde hoteles con shuttle gratuito. Volviendo a los jardines, hablamos de un pulmón orlandés con 200 acres de diseños naturales de diferente índole y espacio, lagos y robles de más de dos siglos de vida. 


200 acres de naturaleza para ti y los tuyos.

Al margen de eventos especiales que organizan como las Fairy Doors que retaban al visitante, mapa en mano (actividad enormemente recomendable para niños) a encontrar estas pequeñas puertas de hadas distribuidas por todo el parque. Dedicad las primeras horas de la tarde y hasta su cierre a los jardines... son , sin duda, uno de los tesoros escondidos de Orlando.
Más información en https://www.leugardens.org/


Juega a buscar en familia las 'Fairy Doors'.

Guía Orlando Día 2: Manglares, International Drive y Icon Park

Amanecemos con el gallo para disfrutar del sol elevándose entre los rascacielos de Orlando pero también para dirigirnos al sur a las instalaciones de Boogy Creek. Un complejo temático que huye de los archiconocidos de Orlando para apostar por la naturaleza, los lagos y actividades lúdicas como el hallazgo de gemas por el método de la vieja fiebre del oro de reunir tierra en una tabla de madera, removerla en el agua y así la arena se marchaba y allí que quedaba la nada... o una piedra preciosa. Un entretenimiento que pondrá el broche a, sin duda, la actividad más interesante de Boogy Creek: los everglades con airboat. En castellano, los manglares a bordo de un hidrodeslizador, a lo Horatio Caine en la cabecera de CSI: Miami. Creednos cuando os decimos que lo veréis desde fuera y os llamará soberanamente la atención, pero pensaréis que su trayecto más corto -30 minutos- debe dejarte algo apático. Desterrad ese pensamiento.




Incluso sin ver numerosos cocodrilos -vimos un par de crías y uno asomando los ojos esperando pacientemente su presa- la experiencia del hidrodeslizador va mucho más allá de contemplar éste y otros ejemplares de la fauna de Florida como pájaros exóticos y tortugas; es la sensación de desplazarte flotando a gran velocidad entre abundnate vegetación que tiñe de verde la extraordinaria laguna por la que te mueves. Unas breves paradas servirán para una igualmente corta explicación sobre lo que observas y puedes observar. Y los auriculares que te proporcionan aíslan completamente cualquier molestia derivada de la potente hélice que impulsa el hidrodeslizador. Apto para todos los públicos, como puedes comprobar ;)

El entorno de Boogy Creek bien merece una visita. 

 Más información en https://bcairboats.com/

Con el subidón adrenalínico de la experiencia entre manglares, retornamos a Orlando para descubrir su parte sur y los 18 kilómetros de la I (International)- Drive, la calle más famosa de toda la ciudad. Restaurantes, atracciones, centros de ocio y zonas comerciales y outlets escoltan una calle por la que puedes desplazarte por el conocido como I-Ride Trolley por 2 dólares, si bien opciones y tarifas planas para entre 1 y 14 días. 

Uno de esos centros de ocio es simbólico, Icon Park. Que además del Museo de las Ilusiones que bien conocemos en Madrid y del que te hablamos aquí encuentras una terna de recomendadísima visita para invertir este segundo día en Orlando. Y con oferta si adquieres entrada para dos de ellos o para los tres. 

Más información en https://iconparkorlando.com/es/

Icon Park es un gigantesco centro de ocio.

The Wheel, ahora renombrada a Orlando Eye, es una noria de más de 120 metros y con tan solo 9 años a sus espaldas, denota modernidad y excelente mantenimiento. Sus cabinas son amplias, aptas para familias con carrito y dotadas... aquí viene la sorpresa al margen de divisar medio Orlando de sde su punto más alto... ¡de Bluetooth para conectar tu móvil a su potente equipo de música y reproducir las canciones que te plazcan para disfrutar en familia y en altura. 

Más información en https://www.theorlandoeye.com/

Del cielo al mundo subterráneo... SeaLife Orlando es un generoso acuario que, como todo en Estados Unidos, es tremendamente interactivo y tan pronto te permite introducirte en burbujas erigidas en mitad de las peceras y cubos como salpica la visita de estaciones en las que aprender a hacer nudos marineros. Paneles informativos interactivos y tremendamente intuitivos, numerosas especies y todo un mundo para descubrir, tocar y con el que jugar niños y adultos. 



Mira, escucha, siente, toca... estás en Estados Unidos. Así son los museos.

Más información en https://www.visitsealife.com/orlando/

Pero si nos preguntáis por cuál de los tres os robará más tiempo, sin duda Madame Tussauds es clara vencedora. Explorada la ciudad a vista de pájaro y las profundidades con múltiples elementos interactivos, resta codearse con famosos de todos los ámbitos y etapas históricas. El museo de cera más famoso del mundo tiene aquí una de sus filiales con recreaciones que van desde el bien -las que menos- hasta el sobresaliente -un alto porcentaje- pasando por el notable alto que alcanza la mayoría. 




Superhéroes, dibujos animados, actores... todo cabe en Madame Tussaud.

Y, como el resto de complejos culturales yanquis, repleto de opciones de interacción, o vueltas de tuerca para presentar los diferentes mundos, ayudando a La Roca en un rescate o bailando con John Travolta en Grease. Todo es prácticamente real en Madame Tussaud, y todo es posible si allí donde se erige es una ciudad estadounidense nacida por y para el disfrute y entretenimiento humanos. 

Más información en https://www.madametussauds.com/orlando/

Orgullo patrio en la zona de los descubridores.

Dos días en los que hicimos de todo y, aún así, sabe a nada con plano de actividades de Orlando en mano. Wanderworks, Seaworld, Gatorland, Cabo Cañaveral... quedaron para un afutura visita. Una ciudad tremendamente excitante y emocionante incluso más allá de los parques. Una de las ciudades más divertidas del mundo.

Más información en https://es.visitorlando.com/

Jesús Clemente Rubio